18.8.13

José Carlos Becerra


Ritmo De Viaje

Este cuerpo que yo acaricio lentamente extendiendo la noche,
este cuerpo donde yo he penetrado en mi propia distancia,
en mi sofocamiento de sombra.

Este vientre donde el amor abarca a la noche,
estos senos donde la luz altera los signos,
este cuerpo al que ahora me entrelazo,
este cuerpo al que ahora me solicito.

Este cuerpo conmigo se traspone, se vence,
se lleva consigo a la noche y sus altares,
sus caminos ardiendo por su propia señal,
su oleaje, sus costas encendidas…

Esta mujer donde la noche descifra sus juegos ocultos,
este amor al que no debemos llamar amor
sino adentro de sus aguas.

Este amor, este amor,
este instante donde el infinito es la obra de los que se aman,
de aquellos que llegan al estanque de cada caricia como buzos sagrados.

Este ritmo, este ritmo de viaje,
esta navegación entre la bruma,
todo lleva consigo su bandera extraviada,
su aurora boreal…


El Otoño Recorre Las Islas

A veces tu ausencia forma parte de mi mirada,
mis manos contienen la lejanía de las tuyas
y el otoño es la única postura que mi frente puede tomar para pensar en ti.

A veces te descubro en el rostro que no tuviste y en la aparición que no merecías,
a veces es una calle al anochecer donde no habremos ya de volver a citarnos,
mientras el tiempo transcurre entre un movimiento de mi corazón y un movimiento de la noche.

A veces tu ausencia aparece lentamente en mi sonrisa
igual que una mancha de aceite en el agua,
y es la hora de encender ciertas luces
y caminar por la casa
evitando el estallido de ciertos rincones.

En tus ojos hay barcas amarradas,
pero yo ya no habré de soltarlas,
en tu pecho hubo tardes que al final del verano
todavía miré encenderse.

Y éstas son aún mis reuniones contigo,
el deshielo que en la noche
deshace tu máscara y la pierde.


Por El Tiempo Pasas

Por el tiempo pasas, lo cruzas, sales de él,
rozas la superficie de la muerte
y distraída sigues hacia donde no sé si sigues.

Eres tú la que cruzas el tiempo,
la que aparta a la muerte como si se tratara de una cortina,
la que se destapa el espejo como si se tratara de una lata de cerveza
que luego te bebes y la arrojas vacía sobre el asfalto.


Tu Rostro Se Borra

La luna es una forma de haber amado.
La noche descuella como un astro hundido,
Como un cuerpo que ha perdido su desnudez para siempre.
Recuerda la habitación en penumbras,
Recuerda la primera cita y atestigua esta puesta de sol,
Porque tuya es la inclinación de mi frente.
Y en mi toma cuerpo tu soledad,
En tu mirada ausente se deshacen los astros y las encrucijadas del verano.
Porque tuyo es el panorama que contemplo: ciudad de a excoriación y la ceniza,
Reunión de cuerpos donde la destrucción se yergue.
Te vas extinguiendo en mi pecho con la misma soltura con que amanece.
Vuela un ave al final de mis ojos,
Tu ausencia se retira de mis actos como si nuevamente
Te marcharas.
Pero recuérdalo todo,
Porque la luna es la boca silenciosa de la noche dormida,
La caricia intentada por los muertos.
Recuérdalo todo.
La luna es una forma de haber amado.